Socorrer a los heridos en el caso de encontrarnos con un accidente de tráfico, más que una obligación, debe ser un acto moral. Existen una serie de actuaciones que podemos tomar a la espera de que acuda al lugar del siniestro el servicio de ambulancias en Santander.
Lo
primero que debemos hacer siempre es mantener la calma. De poca ayuda
serviremos si nos ponemos nerviosos. Una vez con nuestro propio
estado de ánimo bajo control, debemos asegurar la zona mediante un
protocolo conocido como PAS, que significa Proteger, Alertar y
Socorrer.
Para proteger
debemos en primer lugar señalar de forma perfectamente visible la
zona del accidente mediante los triángulos reflectantes y luces de
emergencia. No solamente debemos proteger a los accidentados y
señalizar cualquier elemento peligroso en la carretera, sino que
nuestra propia seguridad también está en juego. Al igual que los
profesionales del servicio de ambulancias en Santander, nosotros deberemos
llevar siempre puesto el chaleco reflectante obligatorio para
garantizar que el resto de vehículos nos vean.
A
continuación, alertaremos
a los servicios médicos y a las autoridades. Nos identificaremos, comunicaremos el lugar de
accidente, víctimas, todo lo que podamos observar y los vehículos
implicados.
Por último, socorreremos
a las víctimas según nuestros conocimientos. En todo caso, si no
estamos seguros o no tenemos formación de primeros auxilios,
deberemos limitarnos a los dos puntos anteriores y esperar por el
servicio médico que vendrá en la ambulancia de Ambulancias Mompia en el menor lapso de tiempo posible.